Un universo de preferencias, predilecciones, gustos, sabores, costumbres y necesidades flota alrededor de la nube del internet. Viajando pasan de sitio en sitio nutriéndose y produciendo contenidos web. En colación son procesados y conforman una valiosa fuente de conocimiento resultado de la inteligencia colectiva de cientos y miles de usuarios.

Toda esta información, adecuadamente orientada podría estar al servicio de importantes empresas u organizaciones que poseen una segmentación errónea o nula.

Una vez identificado nuestro público (tanto interno como externo), el siguiente paso consiste en determinar sus perfiles. Como debería ser aquel comprador decisor, tan importante para la decisión de compra final, ideal para llegar a adquirir nuestro producto o servicio

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En ocasiones las necesidades están ligadas entre si, aquellos consumidores tienen un pasado, un presente, un modo de vida, patrones de conducta, nivel socioeconómico, status quo, y sobre todo metas.

En este último punto es donde se debe hacer hincapié. El producto o servicio que se ofrece no debe catalogar o encasillar a nuestro consumidor, por el contrario debe otorgarle cualidades aspiracionales, es decir motivarlo a poder alcanzar sus metas, superarse. Este punto va más allá del nivel socioeconómico al que pertenezca, según sus ingresos económicos.

Tenemos que tener bien en claro que en Internet no es primordial la apariencia física o situación del que se encuentra detrás de la pantalla. Quien cuente con el servicio de acceso a internet, en cualquier lugar del mundo, está en la misma posición, tan capaz como los miles de millones que también lo poseen. Ya que cuentan con la misma poderosa y valiosa herramienta. Otro tema ya es de la disponibilidad de tiempo o manejo de la herramienta, asuntos de sencilla solución.

Para no desviarnos del tema este nuevo Mktg (online) no debe limitarse a satisfacer necesidades o vender productos, sino prepararse para los nuevos retos que presentan estos nuevos medios de interacción que acapara todos los rasgos sociales.

El monitoreo de las redes sociales (social media) es un gran paso para obtener esta útil información de la que hemos hablado en líneas anteriores. Constantemente en redes sociales como el Facebook  o Twitter se están creando cuentas, comunidades, temas, causas y últimamente ilike pages, que no son más que manifestaciones de los gustos, preferencias, necesidades de nuestros compradores potenciales.

Es tanta la precisión que hasta el rastreo de marcas conocidas se puede dar, obteniendo cifras estadísticas objetivas y cuantificables. Aún mayor es la utilidad en el caso de que la intención sea lanzar nuevos productos o servicios. Este medio (redes sociales) son los lugares ideales elegidos por los usuarios para dar a conocer sus necesidades e inquietudes. Así como lo fueron y lo son las primeras comunidades digitales de consumo como dooyoo , ciao,  amazon, por mencionar algunas en las que se comentan productos, esto muchas veces es favorable por que incrementa los niveles de compra, en otros casos no lo es tanto, pues no todas las opiniones son positivas. En resumidas cuentas desde la perspectiva del consumidor siempre es positiva, pues nos previene de compras vanas.

De esta manera dan a conocer necesidades insatisfechas o los llamados “nichos de mercado”. En el caso del Twitter la interacción es aún más espontánea y directa el uso de los hashtag o palabras o frases prefijadas con un símbolo de hash (#) definen temas, como también lo hacen los Trend topics que son las palabras clave más usadas en un momento dado en Twitter , que son fáciles de identificar y usar. Este es otro nivel de estudio de mercado.